En estas vacaciones, Fundación Wazú, dedicada a la inclusión laboral, realiza un llamado a destacar la importancia del ocio y el descanso para las y los trabajadores en situación de discapacidad.
Disfrutar del ocio y la relajación es una forma de promover la igualdad y la calidad de vida para todas las personas. Planificar unas vacaciones inclusivas, ya sea viajando o descansando en la propia ciudad, implica considerar itinerarios, alojamientos y transportes accesibles, espacios con baja estimulación sensorial y actividades que permitan la participación plena sin limitaciones, explica Elizabeth… Terapeuta Ocupacional de Fundación Wazú. Para facilitar este objetivo, comparte los siguientes consejos prácticos:
- Investigar y planificar con antelación: Antes de viajar o participar en actividades locales, es fundamental verificar que el alojamiento, transporte y actividades elegidas sean accesibles.
- Explorar opciones locales accesibles: Parques, museos, bibliotecas, cines y otras actividades recreativas son excelentes alternativas, siempre que cuenten con accesibilidad adecuada.
- Prepararse adecuadamente: Si se planea una salida, es importante llevar dispositivos de apoyo necesarios, como sillas de ruedas plegables, asientos portátiles, canceladores de ruido, elementos de regulación sensorial u objetos de apoyo emocional.
- Contar con guías especializados: Para actividades guiadas, es ideal contratar profesionales capacitados en turismo inclusivo, quienes pueden garantizar una experiencia personalizada y sin inconvenientes.
- Organizar actividades en casa o en la comunidad: En caso de no poder viajar, se pueden realizar talleres creativos, actividades de jardinería, sesiones de cine o clases de cocina adaptadas.
“Disfrutar de tiempos de ocio es un derecho, no un lujo”, enfatiza Peter Loch, director de la Fundación Wazú. “Es fundamental garantizar que las personas en situación de discapacidad tengan acceso a espacios accesibles para vacacionar, del mismo modo que promovemos su inclusión laboral, no debería ser una excepción contar con vacaciones inclusivas.”
En este contexto, Loch hizo un llamado a plataformas de arriendo de alojamientos, como Airbnb, para que insten a sus usuarios a incluir información sobre accesibilidad y trabajen en la creación de espacios más inclusivos. “En mi experiencia como usuario de silla de ruedas, he enfrentado muchas dificultades para encontrar lugares accesibles. A menudo, estos espacios no son considerados o no están claramente especificados en las plataformas. Por eso, el llamado es a que estas aplicaciones motiven a sus socios comerciales a mejorar la accesibilidad de sus propiedades y a informar sobre estas condiciones de manera clara y visible”, concluyó.
Por último, el llamado es a todas las personas que trabajan en turismo y sectores asociados a abrir su perspectiva, e incluir servicios y experiencias que consideren a las personas en situación de discapacidad y sus familias y amigos.